Os traemos noticias fresquitas... ¡y tan fresquitas! Estas semanas hemos estado muy atareados pues, con el final del verano, llega de nuevo el trabajo duro. El otoño se ha dejado ver por el huertín, ¡mirad lo que ha crecido alrededor!
Uno de los grandes cambios que hemos hecho ha sido la ampliación del huertín... ¡ahora es el doble de grande! Muchas veces nos quedábamos sin espacio para plantar cosas nuevas o las plantas crecían unas encima de otras. Por ello, el sábado pasado nos pusimos manos a la obra, ¡igual que el primer día! La nueva parcela es del mismo tamaño que el anterior, con un espacio entre los dos para poder trabajar con mayor facilidad (¡y para que pase la segadora!)
Durante la excavación, tuvimos algunas dificultades: la tierra nunca había sido trabajada y, anteriormente, había un árbol, por lo que nos encontramos con muchas y grandes raíces. También apareció algún superviviente, que fue trasladado a la compostadora para que continuase con su trabajo.
Pero sin duda, lo más curioso del día fueron todos los "objetos perdidos" que había bajo tierra, pero tiene explicación: antes, hubo un gallinero donde ahora está el huertín.
Por fin, dimos por terminada la tarea de ese sábado... ¡este es el resultado!
Y después de la "paliza" que nos metimos, nos fuimos de folixa a las fiestas de San Mateo... ¡para rematar la faena!
Pero no queremos despedirnos sin antes enseñaros las nuevas luces solares que hemos instalado en el huertín... ¡¡¡muchas gracias por el regalo!!! Nos vienen fenomenal, sobre todo cuando bajamos al huertín de noche para inspeccionar.
Ahora sí que nos vamos... ¡pronto, más y mejor! Os aseguramos que esta semana también ha sido intensa, ¡y tenemos muchas cosas que enseñaros! ¡Esperamos vuestros comentarios!
Un besín.